Autoestimulación masculina: expresión de autoconocimiento y equilibrio

“Masturbarse es pecado” “Quita potencia a los deportistas” “Da ceguera” “Genera disfunción eréctil” “Se encoge el pene…”

Afirmaciones como estas, entre muchas otras que han circulado en la sociedad, a la masturbación se le atribuyen enfermedades como: infertilidad, desequilibrios mentales o debilidad física son mitos de esa práctica sexual. La masturbación solo se convertirá en un problema si comienza a interferir con la vida diaria o en las relaciones con amigos, familiares, lugar de trabajo o parejas románticas.

Si la vida cotidiana de un hombre puede transcurrir donde ocasionalmente se active la necesidad de explorarse o satisfacer un deseo sexual, el cual muchas veces se requiere por no tener pareja o estar ausente un tiempo de ella: ¡Adelante! Permite la autoestimulación para descubrirte a ti mismo, tocarse, sentir cada zona del cuerpo en donde se genere sensibilidad y placer.

“Como no tengo vida sexual activa con mi esposa, ocasionalmente me estimulo, es una forma de sentirme vivo”. Rodrigo, 71 años.

“Todos los días me masturbo utilizando un masajeador y un vibrador, se siente un cosquilleo muy rico al pasar el vibrador tanto en el pene como el ano. Combinar juguetes me ha permitido liberar tensiones y más ahora que vivo solo”. Sebastián, 38 años.

“Es un acto natural desde que no se vuelva obsesivo, desestresa y es placentero. Me masturbo ocasionalmente solo o con mi esposa como parte de nuestra vida en pareja”. Alejandro, 42 años.

¿Se puede hablar de un origen de la masturbación?

No hay evidencias paleontológicas que indiquen si nuestros antepasados se masturbaban o no, “pero teniendo en cuenta que los mamíferos, concretamente los primates lo hacen y que la especie humana pertenece a estos dos grupos, parece razonable pensar que la masturbación ha formado parte de las prácticas sexuales de los homínidos a lo largo de la evolución. En este sentido, la masturbación humana forma parte de la herencia de nuestra evolución”, así lo explica la escritora Georgina Burgos en su libro: La masturbación.

Tan razonable es este argumento de Burgos, que tenemos que decir: la sexualidad como el afecto son necesidades humanas y es por esta razón que el cerebro se convierte en el principal órgano sexual y claramente tanto el amor como deseo son sentimientos humanos que se canalizan en zonas cerebrales que dependen de la excitación y el orgasmo.

El cerebro produce pensamientos y fantasías que necesitan respuesta y si no hay parejas afectivas para resolverlo, la masturbación se vuelve en una acción natural para satisfacer esta necesidad.

La masturbación, proceso de autoconocimiento y bienestar

⦁ Estimula las endorfinas, hormona encargada de regular el estado de ánimo generando reacciones químicas en el cerebro que incrementa los niveles de bienestar y relajación.
⦁ Reduce el estrés y libera la tensión.
⦁ Mejorar la calidad del sueño.
⦁ Estimula la concentración y productividad.
⦁ Mejora el estado de ánimo y disminuye dolores.
⦁ Minimiza pasividades de embarazos no deseados.
⦁ Previene las infecciones de transmisión sexual (ITS).

Descubre estos juguetes y geles que tenemos en Waba para masturbarte y explorar nuevas sensaciones.

¡Anímate a vivir la autoestimulación
como expresión de autoconocimiento y equilibrio!

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